sábado, 17 de julio de 2010

Religión y fé.


Alguien me dijo hoy, que yo era católica convenenciera, y tiene mucha razón, yo llevo "mi religión" a mi manera, creo mucho en Dios, pero no asisto a la iglesia, y no creo haber seguido los mandamientos al pie de la letra. Tal vez ha sido el hecho de que no creo en los sacerdotes, desde chica me decepcionaron, porque ¡hay cada caso!! lo que vemos y oímos de ellos no es nada agradable, me doy cuenta que muchos realmente no tienen la vocación, lo cual es muy triste y no se porque entran a formar parte de la iglesia sino tienen el deseo de servir a Dios, tal vez lo hacen porque así conviene a sus intereses, lo cual es peor todavía.

Bueno dejando aparte lo de los sacerdotes, (que ellos sabrán lo que hacen) creo que esto no nos debiera alejar de la iglesia, total que cada quien cargue con sus culpas, y nosotros a hacer lo nuestro, sin mirar que hacen los demás, pero creo que el mundo moderno hace que nos volvamos apáticos en cuanto a religión se trata y muchos pensarán como yo, que con creer en Dios, es bastante y estoy pensando seriamente que eso no basta.

Los tiempos que vivimos son muy estresantes, andamos nerviosos, de prisa, enojados, malhumorados, sea por la razón que sea, porque unos se quejan que trabajan mucho, otros porque no encuentran trabajo, otros más por pleitos con la familia o porque el dinero no alcanza, porque se casan, porque se divorcian, en fin, pretextos sobran, y creo que a lo mejor es porque nos hemos alejado mucho de Dios, pensamos en todo, menos en el, que triste ¿verdad? ¿será que ya se aproxima el final? o será que ya no nos importa nada ni nadie, solo lo material es lo que cuenta.

Yo viví una niñez en la cual no se miraba todo como hoy, recuerdo a las personas sonrientes, amables, respetuosas, la familia reunida platicando, yendo a la iglesia los domingos y después a visitar a los familiares o aunque sea al parque a pasear y estar el domingo la familia reunida, para empezar nuevamente la semana cada quien sus labores. Estaba todo muy bien distribuido, el papá a trabajar, la mamá a cuidar de los hijos, los niños a la escuela, después cuando todos regresaban de sus labores, la comida en familia y los relatos de los adultos que tanto agradaban, después entre todos a levantar la mesa, ¡que tiempos aquellos, como los añoro!!.

La vida moderna, con todo y sus comodidades está acabando con las familias, ya no hay ninguno de los roles que antes mencioné, ya cada quien hace lo que le da la gana o lo que por fuerza tiene que hacer para seguir adelante y poder vivir más o menos bien, se ha perdido el respeto, la amabilidad, la comunicación, la unión familiar, que es la base de la sociedad. Yo creo que todo esto tiene que ver por lo que ya he dicho antes, que nos hemos alejado de Dios, yo lo reconozco que si creo en él, aunque no voy a misa, pero otros ya ni siquiera creen.

Ojalá que recapacitáramos un poco y volviéramos a tener fé, que buena falta nos hace, donde hay amor, esta Dios y donde está Dios, no falta nada, porque él con su infinita misericordia se encarga de todo, acuérdense que todo lo material es terrenal, no nos lo vamos a llevar, aquí se quedará para que otros lo gocen y lo que se nos tomará en cuenta es que hicimos y como lo hicimos, así que cada quien en su religión que se acerque más a Dios para que podamos llevar una mejor vida y nos alejemos un poco de lo material, ¡nunca es tarde, y Dios todo lo perdona!!.

No hay comentarios: